Tapachula, Chiapas.- La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) reportó que logró la desarticulación de las bandas delictivas identificadas por las autoridades como Clica de Tonalá, Clica de Arriaga y Mano de Fuego. En la última se detuvo a dos personas y se rescató un menor de cuatro años de edad, quien fue secuestrado en Guatemala e introducido a México de manera ilegal.
Las autoridades refirieron que Las Maras son grupos delictivos que iniciaron actividades en Los Ángeles, Estados Unidos, en la década de los 80.
A partir de ahí, el fenómeno delictivo en el que se asociaron pandillas criminales se internacionalizó tanto que células y clicas se establecieron en toda América Latina, realizando asesinatos, secuestros y extorsión.
En México, en particular en Chiapas, la presencia de Las Maras se recrudece debido a que en los años 90, El Salvador, Honduras y Guatemala iniciaron el contraataque, con operaciones y leyes de seguridad para erradicar los índices de violencia.
En el 2000, las autoridades estatales habrían ordenado el combate interinstitucional contra esos grupos de pandilleros y, sólo después, se integró el grupo antipandilla, con lo que en ese entonces se erradicó la presencia de la Mara Salvatrucha 13 y Barrio 18.
En 2008, esas acciones las retomó la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos en Contra de Inmigrantes, pues entre sus funciones se encuentra el procurar justicia a los inmigrantes, además de combatir el crimen contra ellos en los municipios costeros de Chiapas.
En el caso de la Clica de Tonalá se detuvo al jefe de esa banda, Hugo Alberto "N", junto con Manuel "N", Paulo "N", Pedro "N", y Jaime "N".
De la Clica de Arriaga fue aprehendido el presunto jefe de ese grupo, Emilson "N", de nacionalidad hondureña y con él cayeron Ricardo "N", Denis "N" y el sinaloense Viviano "N".
Según expedientes confidenciales de la dependencia, estos habrían empezado a cobrar "derecho de piso" y cometido asaltos en las inmediaciones de las vías del ferrocarril.
En tanto que de La Mano de Fuego se detuvo a José "N" y a Sandra "N", ambos de nacionalidad salvadoreña, implicados en el secuestro de un menor, localizado en una casa de seguridad, al sur de esta ciudad.
De 2002 a 2005, Los Maras fueron protagonistas de infinidad de hechos sangrientos en la región Soconusco, en especial en esta localidad, donde atacaron en dos ocasiones con armas de fuego hechizas a estudiantes que participaban en desfiles deportivos.
Informes de inteligencia de la Procuraduría General de Justicia del Estado confirmaron que grupos de La Mara Salvatrucha planean restablecer actividades en la frontera sur, sobre todo en las inmediaciones de las vías del tren, de Suchiate a Arriaga.
De acuerdo con esos informes, lo recientes días, delincuentes identificados con esa banda empezaron a cobrar "derecho de piso" y a cometer asaltos en las inmediaciones de las vías del ferrocarril, donde se calcula que a diario llegan unos 200 inmigrantes y cada tres días se van sobre el tren hasta 800 centroamericanos.
También les habían exigido a sus víctimas fuertes cantidades de dinero para brindarles seguridad, bajo la amenaza de muerte si no accedían a sus chantajes.
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