Merida, Yucatan.- Las autoridades continúan las investigaciones en torno a la muerte del taxista Adrián Armando Sosa Chávez, y ya surgió la versión respecto a que unos sujetos estaban en busca de un pariente de éste, Edgar Alejandro Hernández Chávez (a) “El Horqueta”, quien es conocido “tirador” de cocaína y piedras de “crack” e incluso ha estado preso en dos ocasiones por delitos contra la salud. El domingo publicamos que el taxista Adrián Armando Sosa Chávez fue ejecutado de un disparo en la cabeza en el interior del automóvil de alquiler a su cargo, en una calle del fraccionamiento Francisco de Montejo, en el norponiente de esta ciudad.
De acuerdo con la información proporcionada por la Fiscalía General del Estado el disparo fue hecho con un arma calibre 9 mm y además la autopsia reveló que este individuo no estaba ebrio o drogado cuando fue privado de la vida. La reconstrucción de las últimas horas del taxista señalan que el último servicio que hizo fue a las puertas del centro nocturno “Safari’s 2000″, ubicado en la carretera Mérida Cancún, en donde subió alrededor de las 4 de la mañana a un hombre y a una mujer (supuestamente una bailarina exótica de ese establecimiento), y luego fue hallado muerto en el interior del taxi en la calle 56 entre 49 C y 49 D del fraccionamiento Francisco de Montejo con un tiro en la sien derecha. Los vecinos del rumbo que dieron aviso a las autoridades indicaron que luego de escuchar una detonación salieron a indagar qué ocurría y vieron que el taxi aún estaba con el motor en encendido, las luces prendidas y con las puertas del lado derecho (del copiloto y la de atrás) abiertas, lo que indica que los homicidas eran dos (posiblemente la pareja que subió en el “Safari’s”) y salieron rápidamente de la unidad sin darles tiempo de cerrar las portezuelas y se habrían subido a otro carro que los esperaba cerca. Algunas versiones señalan que en el interior del vehículo había un mensaje de amenazas hacia los líderes de agrupaciones de taxistas para que esos vehículos sean utilizados como vehículos de distribución de drogas, como sucede en Cancún y Playa del Carmen, Quintana Roo. Cabe señalar que algunas bailarinas exóticas son consumidoras de estupefacientes o son “conecte” para la venta de droga a clientes de los centros nocturnos. También se menciona que el o los homicidas estaban en busca del narcomenudista Edgar Alejandro Hernández Chávez (a) “El Horqueta”, quien es familiar del ahora occiso, por lo que hubo una discusión que terminó con el asesinato de Sosa Chávez.
La última ocasión que Edgar Alejandro Hernández Chávez fue detenido fue el 11 de febrero de 2010, cuando fue sorprendido por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública en la calle 62 por 101 y 103 de la colonia Delio Moreno Cantón, en el sur de Mérida, cuando comerciaba 70 piedras de crack. También, el 5 de junio de 2009, fue aprehendido por la SSP en la calle 79 por 42 del centro de esta ciudad, con dos onzas de crack y siete mil pesos en efectivo del producto de la venta del alcaloide. Por cierto, las autoridades señalan que “El Horqueta” tiene su domicilio en la calle 42 entre 79 y 81, mismo que apareció en una de las credenciales que llevaba el taxista asesinado. Tampoco se descarta un motivo pasional en este crimen, como mencionó el dirigente del FUTV, Nerio Torres Ortiz, porque es común también que algunos taxistas se involucren sentimentalmente con las bailarinas a las que trasladan todos los días de su casa al centro nocturno y viceversa (los toman como choferes fijos para que les cobren una tarifa menor), y pudo ser asesinado por el acompañante de la chica, un lenón, motivado por los celos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario